"Más chutes no.Ni cucharas impregnadas de heroína.No más jóvenes llorando noche y día.Solamente oír tu nombre causa ruina."
La palabra ruina se queda corta con todo lo que suponen las drogas. Cada año,miles de jóvenes caen entre sus garras.
Al principio por diversión y al final por adicción.
Es un camino muy intenso donde familiares y amigos ven cómo la persona a la que tanto quieren está engañada,confundida,hundida.
Es un camino muy excitante...
Las sensaciones se multiplican.
Los problemas desaparecen.
Se sienten libres,con posibilidad de echar a volar.
Cambian las amargas lágrimas por dulces sonrisas.
Cambian las peleas entre las sábanas por luchas entre hombres salvajes.
Se vuelven distantes,fríos y desconocidos.
Crean un mundo paralelo donde no se dan cuenta de que conocen todos los baños de la ciudad.
No se dan cuenta de que las cicatrices que en la piel quedarán marcadas nunca las abandonarán.
Pierden su vida; los amigos, la familia.
Pierden el tiempo; oportunidades de mejorar.
Pero llegará un día,en el que se arrepentirán de caer en ese mundo.
Se avergonzarán de malgastar el dinero que sus padres ganan con el sudor de la frente.
Y nosotras seguiremos a su lado, esperando la caída final, esa que determina caer al fondo del mar o salir a flote.
P.D: En esta vida se puede salir de todo por muy bajo que hayas caído.
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